miércoles, 2 de mayo de 2007

Aunque sabía que no estabas

Esperé sabiendo que no llegarías.
Me fui a la cama. A oscuras empecé a tocarle. Él dormía pero yo tenía en mi mano el despertador. Me lo follé, así, sin más. En el momento en que me corría tu voz vino a mi, demasiado cercana en el tiempo, entrecortada, susurrante y apreté mi pelvis fuertemente para no perderte, para disfrutarte. Él eyaculó dentro de mí, pero te sentí a ti.
Volví sabiendo que no estabas, que hoy no estarías, pero tenía que contártelo.